
Parque Nacional Aparados da Serra y Parque Nacional Serra Geral
RIO GRANDE DO SUL E SANTA CATARINA – BRASIL
Arquitectura y protección de un paisaje increíble
Los Parques Nacionales Aparados da Serra y Serra Geral forman parte de un escenario impactante, entre extensas grietas y superficies verticales de más de 700 metros de altura, desde las que caen en picado numerosas cascadas que desembocan en ríos de aguas tranquilas..
Sin embargo, las visitas a las unidades de conservación siguen siendo escasas en vista de este enorme potencial. Al mismo tiempo, vivimos en un escenario en el que la gestión de ubicaciones similares enfrenta cada vez más desafíos diferentes, incluida la necesidad de una mayor disponibilidad de recursos para la conservación, preservación y mantenimiento de los servicios ecosistémicos que brindan estas áreas.
El proyecto es parte de un estudio de factibilidad para la identificación y estructuración de modelos de asociación con miras a mejorar el manejo y conservación de la biodiversidad del parque, así como la generación de beneficios sociales y económicos para su entorno. Se apuntó al desarrollo e implementación de mejoras en las infraestructuras y actividades de visitación en los parques, teniendo como una de sus premisas incrementar el flujo turístico, así como el tiempo del visitante en los atractivos, ampliando la diversidad de equipamientos y servicios turísticos ofrecidos, como una forma de enriquecer la experiencia de los visitantes.
Ubicado en el “Caminho dos Cânions”, región turística entre los estados de Santa Catarina y Rio Grande do Sul, los principales atractivos visitados en los parques son los cañones de Itaimbezinho y Fortaleza, en el Parque Nacional (PARNA) Aparados da Serra y PARNA Serra Geral, respectivamente.


La infraestructura para uso público en las dos unidades de conservación, sin embargo, no sigue la exuberancia y relevancia de sus atractivos, siendo prácticamente inexistente en algunos lugares.

Hay dos parques distintos que se entrelazan y albergan ubicaciones con particularidades y vocaciones que se complementan.
Se observaron ocho centros por sus diferentes identidades y características, dirigiendo un enfoque estratégico que fortalece el potencial turístico de cada localidad al componer una red de reorganización de visitación que incluye reforma e implementación de infraestructura de apoyo y nuevos atractivos.
El diseño de las nuevas intervenciones considera los atributos naturales utilizando soluciones y estrategias que, además de conformar interiores adaptados a las variaciones climáticas, generan espacios habitables y camuflan los edificios en el relieve, partiendo de la premisa de una integración total con el paisaje y una mínima interferencia en el escenario natural y único de los parques.

El proyecto define el desarrollo de estructuras de apoyo a la visitación, tales como recepción, servicio de alimentación, comercio, boletería, transporte, espacios para actividades de educación ambiental, camping, decks para bañarse en el río, además de la implementación de infraestructura como miradores, puentes colgantes, circuitos para bicicletas, entre otros.



En los principales atractivos se propuso estructurar tramos de senderos y miradores mediante placas modulares que se adapten a la topografía y formen tramos del sendero con accesibilidad universal.


La reorganización de la estructura de visitas de los parques prevé un nuevo portal de acceso que contará con un estacionamiento central y una estación del sistema de transporte interno propuesto, cuyo uso se realizará principalmente en los días de alto flujo de visitas. La adopción de un nuevo sistema de transporte en el parque es una medida que busca reducir la circulación de autos dentro de las unidades de conservación, disminuir el impacto de la construcción de nuevos estacionamientos, brindar un mayor control de la dinámica de visitación en los parques, además para mejorar la accesibilidad a las distintas atracciones.




Este trabajo se llevó a cabo en el marco del Proyecto PAPP “Alianzas Público-Privadas Ambientales”, implementado por el ICMBio y el Ministerio del Ambiente con el apoyo financiero de varios socios, entre ellos el BID y la CAIXA y que, en el marco de la gestión de unidades de conservación, tiene como objetivo establecer modelos de gestión basados en la formación de arreglos institucionales y modelos de asociación capaces de ampliar los procesos de visitación, una oportunidad para la inclusión socio-productiva y asegurar medios efectivos de conservación del medio ambiente y la biodiversidad.